El documento nacional de identidad (DNI) tal y como lo conocemos comenzó a utilizarse con la publicación de un decreto en 1944. Hasta el año 1951 Franco no “adquirió” el suyo. El número elegido fué el uno.
Más tarde Franco reservó el número dos para su mujer Carmen Polo y el número tres para su hija. Los números que van del cuarto al noveno han quedado – por ahora – vacantes.
Desde el número 10 al 99 están reservados para la monarquía. El número 10 pertenece al Rey Juan Carlos Borbón y Borbón, el 11 es para Doña Sofía, el 12 para la infanta Elena y el 14 para la infanta Cristina. El 15 le corresponde al Rey Felipe, y los números 16 y 17 a sus hijas Leonor y Sofía.
El 13 se anuló por superstición.