
El ingeniero autodidacta William Mulholland construyó esta presa en Los Angeles sobre cimientos defectuosos e ignoró la geología del cañón circundante.
Además despreció las grietas que empezaron a aparecer en cuanto comenzó a llenarse. Cinco días después, la presa se rompió matando a 450 personas y destruyendo ciudades enteras (así como la carrera de Mulholland).