Desde el punto de vista religioso, la confirmación es un sacramento que se realiza generalmente en la edad adolescente y que consiste en la imposición de las manos por parte del obispo y la unción con el aceite sagrado. Esta ceremonia viene a completar el bautismo, ya que el confirmando renueva su compromiso de seguir a Cristo y recibe el Espíritu Santo. Según el Catecismo de la Iglesia Católica, “la confirmación es el sacramento que completa el bautismo, y nos fortalece y nos configura plenamente como miembros activos e interesados de la Iglesia. Al bautizado se le imponen las manos, se le unge con el aceite de la crisma y se le dice: ‘Recibe el Espíritu Santo'” (CCC, n. 1316).
La confirmación es un sacramento que viene a completar el bautismo, y que nos fortalece en nuestro compromiso de seguir a Cristo. Al ser confirmados, recibimos el Espíritu Santo, que nos da fuerza para vivir nuestra fe de manera plena y activa.
Hay muchas razones por las que alguien podría considerar hacer la Confirmación. Algunas personas lo hacen para completar su viaje de iniciación católica, mientras que otras lo hacen para comprometerse más profundamente con su fe. La Confirmación es un sacramento en el que el Espíritu Santo desciende sobre el confirmando y lo llena de gracia. Esta gracia fortalece al confirmando para que pueda vivir su vida como un buen cristiano.
Qué significado tiene recibir la Confirmación
Recibir la Confirmación significa que una persona ha sido aceptada por la Iglesia como miembro pleno. Esto viene después de haber recibido el Bautismo, y confirma que la persona está lista para seguir el Camino de Cristo.
La confirmación es un sacramento en el que el creyente recibe el Espíritu Santo y se compromete a seguir a Cristo. A partir de este momento, la vida del confirmado cambia radicalmente, ya que debe vivir de acuerdo a los principios de la fe cristiana. Esto significa que debe ser honesto, amable, solidario y compasivo con los demás. Asimismo, debe orar y ayunar regularmente, asistir a la iglesia y leer la Biblia.
La Confirmación es un sacramento que se celebra en la Iglesia Católica. El sacramento de la Confirmación completa el bautismo, y es necesario para ser un miembro pleno y activo de la Iglesia. En la Confirmación, los católicos reciben el Espíritu Santo, y son confirmados en su fe.
La confirmación es un sacramento en el que uno confirma su decisión de ser católico. Al confirmarse, uno recibe el Espíritu Santo y se compromete a seguir a Cristo y a vivir su fe.
