El Oficial de Filipinas y antropólogo aficionado, Manuel Elizalde, anunció en 1971 el descubrimiento en Mindanao de los “tasaday”, una pequeña tribu primitiva que vivía aislada en la selva, y de la que dijo eran el pueblo más primitivo de la tierra.
Según Elizalde vivían casi como en la Edad de Piedra, en armonía total con la naturaleza hasta el punto que desconocían el significado de la palabra “guerra”.
Elizalde consiguió que se aislara la zona donde vivían para preservar su existencía, su gran hallazgo antropológico.
Quince años después fue acusado de haber cometido un fraude al haber contratado a personas para hacerse pasar por dicha tribu.
Su finalidad que no quedo clara nunca, notoriedad.
