Esta crisis comenzó cuando Rusia, una antigua república soviética que Moscú considera parte de su identidad y de su esfera de influencia, que considera esencial para su seguridad, se negó a aceptar el acercamiento entre la OTAN y la UE.
La crisis se agravó cuando Occidente impuso sanciones a Rusia por su injerencia en Ucrania, incluida la anexión de Crimea.
El desencadenante inmediato de la crisis fue la decisión de Rusia de anexionar Crimea, que formaba parte de Ucrania desde la disolución de la Unión Soviética en 1991. Moscú justificó esta medida alegando que los habitantes de Crimea querían formar parte de Rusia y que el gobierno ucraniano de Kiev era ilegítimo.
Occidente condenó las acciones de Rusia como una violación del derecho internacional e impuso sanciones a Moscú. En respuesta, Rusia ha intentado socavar el gobierno prooccidental de Kiev y desestabilizar a Ucrania en su conjunto.
La crisis ha provocado un fuerte deterioro de las relaciones entre Rusia y occidente. Además ha tenido un gran impacto en la economía mundial.
Las raíces de la crisis se remontan a principios de la década de 1990, cuando Rusia y Ucrania formaban parte de la Unión Soviética. Tras el colapso del comunismo en 1991, Ucrania se convirtió en un estado independiente. Sin embargo, Rusia se consideraba el Estado sucesor de la Unión Soviética, y veía a Ucrania como parte de su esfera de influencia.
En 1994, Rusia y Ucrania firmaron el Memorando de Budapest, en el que acordaron respetar la integridad territorial de la otra parte y abstenerse de utilizar la fuerza contra la otra.
En los últimos años, Rusia se ha opuesto cada vez más a la profundización del compromiso de Occidente con Ucrania, incluidos sus planes de proporcionar ayuda económica y militar. Moscú también se ha enfadado por el apoyo de Occidente a las sanciones contra Rusia por su intervención en Ucrania y la anexión de Crimea.
La crisis comenzó en noviembre de 2013, cuando el presidente ucraniano, Víktor Yanukóvich, se negó a firmar un Acuerdo de Asociación con la Unión Europea, optando en cambio por estrechar lazos con Rusia. Esto provocó protestas masivas en Kiev, que finalmente condujo a la destitución de Yanukovich en febrero de 2014.
Posteriormente, Rusia intervino en Crimea y se anexionó la península en marzo de 2014. Occidente condenó las acciones de Rusia como una violación del derecho internacional e impuso sanciones a Moscú.
En respuesta, Rusia ha intentado socavar el gobierno prooccidental de Kiev y desestabilizar a Ucrania en su conjunto.
¿Cuándo empezó el conflicto entre Rusia y Ucrania?
La primera fase del conflicto ruso-ucraniano tuvo lugar de 2014 a 2015, cuando aún estaba en sus primeras etapas. Le siguió un periodo de alto el fuego, que dio paso a una escalada de los combates a partir de 2021.
