
Alude a una expresión del rey Fernando VII al pasar revista real, en el siguiente contexto: Instituida por la Revolución de 1820, la milicia de Madrid fue disuelta después de la entrada de los franceses en 1823 y sustituida por los voluntarios realistas.
Cuando estos se presentaron por primera vez delante de Fernando VII, este se sorprendió al ver que aquellos nuevos soldados realistas eran los mismos milicianos liberales que acababa de licenciar y refirió la citada frase a su soldado de guardia: «Pero, si son los mismos perros con distintos collares».
Su significado actual:
muestra el rechazo a la misma nefasta actuación o situación pero con diferentes personas.